lunes, 10 de agosto de 2009

Metainteligencia: ¿Espiritualidad en los Negocios?

publicación en Ciudad.com:

¿Cuáles son los factores que maximizan la riqueza en las personas y en las organizaciones? Aquí, algunas claves para identificarlas.

metainteligencia con gente

Las organizaciones del trabajo se definen como: "Un conjunto de personas que interactúan para obtener resultados", de acuerdo con esta definición en la calidad de dichas interacciones o conversaciones se define la calidad de los resultados que dicha organización obtiene. Aspecto también conocido como "el aporte de valor que dicha organización genera".

¿Por qué entonces es importante tener en cuenta la espiritualidad aplicada a los negocios? "Porque el desempeño de las personas está íntimamente relacionado con el sentido de su aporte. Es decir, la forma en que cada uno se realiza como persona en lo que hace diariamente. Es así como se puede entender la diferencia entre "tener un empleo" o "realizar un trabajo". Sólo el desarrollo integral de todas nuestras inteligencias y en particular "la menos utilizada" pero la "más importante", es decir, la Inteligencia Espiritual nos puede elevar de manera que personas simples, sencillas, ordinarias lleven a cabo actos que se convierten en extraordinarios, es decir, plenos de humanidad", explica el ingeniero Guillermo Abel Rodríguez , con una Maestría en Coaching Organizacional.


Para el ingeniero, la Humanidad se puede medir por el nivel de compromiso, creatividad, confianza, etc, "Es un modo de Ser que contagia y promueve el hecho de abandonar el 'tener que trabajar' y salir de la obligación, para pasar a la cultura de 'querer lo que hago en mi trabajo', esto se conoce como Auto motivación", aclara Rodríguez, quien ya lleva más de 35 años de experiencia brindando workshops, capacitaciones y talleres dinámicos en empresas, procesos de consultoría, charlas a la comunidad y Coaching (entrenamiento) a personas y equipos de trabajo, identificando y removiendo los obstáculos de manera que éstos puedan alcanzar su máximo rendimiento.

Este análisis permite observar la importancia central que representa el Capital Humano (CH) en el desempeño de toda organización. "Desde Metainteligencia definimos dicho capital a través de la fórmula

CH (Capital Humano) = (Competencias + Compromiso) X Conciencia.

Cuando los clientes aceptan este enfoque se produce un cambio de paradigma. Se abandona la cultura de carencia o de recursos escasos para apreciar la abundancia en la que todos podemos desempeñarnos. Esto implica una transformación personal y organizacional que maximiza la generación de riqueza abarcativa. Se cambia la cultura del miedo por el entusiasmo, la ambición por la contribución, del mirar hacia fuera por el comenzar a valorar y reconocer el potencial propio. Este procedimiento eleva el nivel de Conciencia que es factor de Multiplicación del Capital Humano", sostiene el especialista.

Rodríguez recuerda que en sus comienzos como empresario pasó un largo tiempo considerando que su esfuerzo era válido si obtenía dinero, es decir, si producía utilidades. "Con el tiempo descubrí que ganar sólo dinero puede ser una forma de sentirse pobre humanamente. Sólo cuando reconocí, por medio de la Inteligencia Espiritual, cuál era la función que podía desempeñar al reconocer la riqueza subyacente en todo ser humano y cómo dicha riqueza me complementaba y enriquecía comprendí, cuál era el verdadero valor del trabajo, en este sentido recuerdo una frase movilizante del poeta Jalil Gibran: 'El trabajo es el Amor hecho visible'", reflexiona el ingeniero , autor del libro "Liderazgo y Espiritualidad, la eficacia esencial".

Las competencias humanas para cada función no admiten hoy en día discusión, cada cargo requiere de competencias técnicas y de competencias genéricas, con las primeras desarrollamos habilidades específicas para la tarea a desempeñar, en cambio con las competencias genéricas se busca desarrollar la capacidad de interactuar potenciando las capacidades individuales en el trabajo en equipo, el foco en el cliente interno/externo. "Sin embargo, tenemos que tener en cuenta que la conciencia se manifiesta con el desarrollo de la Inteligencia Espiritual, es esta inteligencia la que nos permite acceder al conocimiento no conceptual, a la sabiduría, es decir, al conocimiento que está más allá de la mente. Nace así la motivación Trascendente, es sólo este tipo de motivación la que logra que seres ordinarios alcancen resultados extraordinarios", explica el especialista.

Para Rodríguez, la Conciencia es fuente de quietud, de inteligencia universal que sólo es posible manifestar a través del ser humano. "Todos los seres humanos tenemos acceso a esta dimensión. La Conciencia es el espacio donde los seres humanos alcanzamos el estado de realización que nos lleva a convertir los actos humanos en plenos de humanidad. Se requiere para ello un regreso para descubrir lo que Soy. Un reencuentro con el Ser que soy. Es Ser en el Hacer", concluye.

Para quienes deseen obtener más información sobre la Metainteligencia, pueden visitar:
www.metainteligencia.com

,,,,,,,,,

,,,


Leer más...

lunes, 3 de agosto de 2009

TENER O SER - ¿Cómo define la sociedad la identidad individual?

¿Cuál es el precio que se paga para obtenerla?

Desde Metainteligencia consideramos la respuesta a estas preguntas como relevantes a la hora de evaluar cuál es la calidad de vida por la que estás trabajando o cuál es el bienestar que impregnas en lo que haces a diario.

Ensayemos algunas probables respuestas a través de las siguientes reflexiones:

Los seres humanos en el siglo XXI nos encontramos realizando esfuerzos denodados para confirmar el sentido de lo que somos a través del Tener. La sociedad nacional y global afirma que alcanzarás cierto grado de realización a medida que cumplas los “sueños” y obtengas aquello que deseas tener o que se configura como apropiado a tu nivel socio económico. Si alcanzas ciertas metas o si obtienes aquellos bienes que te propones o proponen sentirás cierto grado de felicidad, podríamos decir resumiendo: te sentirás bien.

Si en cambio no alcanzas o no logras los bienes o metas te sentirás mal.

el_enemigo_en_el_espejo, quien soy, mirror

Lo que sentimos, es decir nuestros sentimientos, aquello que experimentamos como indicadores de lo que nos satisface o no nos satisface, se moverán de un extremo al otro.



Se moverán desde el andarivel del bienestar al andarivel de la frustración. Una suerte de cambio casi constante a través de la pista de atletismo que será un correlato dependiente con el éxito que “tenemos u obtenemos”. Tener u obtener alguna “forma” material, emocional o de pensamiento se puede transformar en confirmación, en validación para aquello que creemos ser.

Nuestra autoestima, es decir nuestra propia validación, aquello que confirma lo que somos o al menos la imagen de lo que imaginamos que somos, queda sujeta a la capacidad de obtener o tener.

Es relativamente simple de comprender que en un mundo de cambios tan acelerados todas las “formas” materiales, emocionales y de pensamiento se vuelven obsoletas con marcada rapidez. De este modo el mundo de las “formas” es claramente transitorio y de esta manera nos encontraremos en poco tiempo buscando nuestra identidad en alguna nueva forma, la mayoría de las veces con bastante ansiedad (estrés) y algunas de las veces con angustia.

Desde nuestra observación consideramos el estado de felicidad al que todo ser humano aspira como superior cuando en su cometido anhelamos la Paz. En este sentido redefinimos la aspiración a la felicidad como una resultante de la Paz vivida en nosotros y practicada con los otros. La Paz es en primer término Paz Interior.

La Paz Interior sólo puede surgir de la convicción que los actos que realizo, el estado en que vivo responde a lo que en verdad soy. Es allí cuando la autoestima, la auto valoración, es decir el juicio que realizamos de nosotros mismos, se transforma en aceptación, en amor a si mismo. Surge la verdadera Paz. Se traduce en reconocer y valorar el Ser único e irrepetible que Soy.

En este nuevo anclaje lo que hacemos, obtenemos o logramos adquiere un valor diferenciado. No se define en ello lo que somos. Lo que somos es decir el Ser, no busca obtener haciendo, sino que anhela impregnar el hacer.

Es sólo bajo estas circunstancias cuando decidimos modificar “lo que tengo que hacer” o “lo que me conviene hacer” eligiendo: Querer lo que hago!!!

Guillermo Rodriguez




Leer más...